Los Rams no pudieron recorrer los playoffs para llegar hasta Minnesota y jugar el Super Bowl LII luego de su extraordinaria temporada 2017. Pero el equipo angelino de todos modos fue gran noticia al obtener un cargamento de trofeos en esta fría ciudad pocas horas antes del juego por el campeonato de la NFL.

Dentro de los "Honores de la NFL", que es la gala para condecorar a lo mejor de la campaña, los Rams "se robaron" la noche gracias a que Sean McVay, Todd Gurley y Aaron Donald fueron premiados como Coach del Año, Jugador Ofensivo y Jugador Defensivo del Año, respectivamente.

Tom Brady, que este domingo jugará en su octavo Super Bowl, fue el ganador del premio al Jugador Más Valioso (MVP) de la temporada, convirtiéndose a sus 40 años en el hombre de mayor edad en conseguirlo, mientras que J.J. Watt, el sensacional liniero defensivo de los Texans, fue galardonado con el trofeo Walter Payton al "Hombre del Año" como reconocimiento a sus admirables esfuerzos para ayudar a los afectados en Houston y alrededores por el Huracán Harvey tras reunir arriba de 37 millones de dólares en un fondo de ayuda.

Pero antes de que Watt conmoviera a las grandes estrellas de hoy y de ayer de la NFL con su emotivo discurso, la noche les perteneció por completo a los Rams en el estupendo teatro Northrop en el campus de la Universidad de Minnesota.

Mientras afuera no dejaba de caer nieve, Donald fue el primer galardonado de los Rams. El liniero defensivo recibió 23 de los 50 votos para superar al también liniero Calais Campbell (Jacksonville, 17) y al linebacker Chandler Jones (Arizona, 5).

"Es un sueño hecho realidad. Esto es por lo que sacrificas tu cuerpo", dijo Donald, en su cuarta temporada en la NFL y que logró 11 capturas de quarterback y cinco balones sueltos forzados a pesar de que se perdió todo el entrenamiento y la pretemporada de los Rams en medio de una disputa contractual.

"El cielo es el límite", dijo Donald, emocionado casi hasta las lágrimas, sobre los Rams, dándole crédito a Sean McVay por su liderazgo en el equipo. "Tenemos mucho margen para crecer".

El segundo jugador carnero en ser premiado fue Gurley, el líder de la liga en yardas totales con 2,093 y en touchdowns con 19. No fue el campeón corredor de la temporada solamente porque McVay decidió no uniformarlo en la semana 17, cayendo al segundo puesto por apenas 22 yardas.

Gurley, quien dos años antes fue nombrado Novato Ofensivo del Año, obtuvo  37 de 50 votos para superar al receptor Antonio Brown (Pittsburgh, 8), a Brady (Nueva Inglaterra, 4) y al receptor DeAndre Hopkins (Houston, 1).

"Gracias a mi familia, a mis compañeros y sobre todo al coach McVay", dijo el corredor. "Tenemos uno de los mejores entrenadores jóvenes, uno de los mejores en general de la NFL".

La "trifecta" de los Rams la completó McVay al ser nombrado el Coach del Año con holgada ventaja sobre un muy notable grupo de candidatos: obtuvo 35 de los 50 votos, por encima de Mike Zimmer (Minnesota, 11), Doug Marrone (Jacksonville, 2), Bill Belichick (Nueva Inglaterra, 1) y Doug Pederson (Filadelfia, 1).

Alguno de entre Belichik y Pederson iba a levantar el Trofeo Vince Lombardi el domingo en el US Bank Stadium, pero fue McVay quien levantó el trofeo a entrenador más destacado tras llevar a los Rams de regreso a los playoffs con una marca de 11-5 y el título de la División Oeste de la NFC.

McVay, que en enero de 2017 se convirtió en el entrenador en jefe más joven de la historia de la NFL al ser firmado por los Rams a sus 30 años de edad, lo hizo transformando al equipo, liderando con su plan de juego al ataque más prolífico de la temporada y generando un fresco liderazgo en la franquicia angelina.

"Esto es un reflejo de nuestro equipo y de nuestra organización", dijo McVay sobre su galardón con la humildad que le caracteriza.

"Sabemos que habrá expectativas un poco mayores… Vamos a usar esto (los premios) como motivación. Y vamos a trabajar un día a la vez, una práctica a la vez... Estamos muy emocionados", comentó sobre lo que viene para los Rams.